Cansahcab resalta por su gran gastronomía, industria y haciendas. Sin embargo, también cuenta con lugares subterráneos que nos enriquecen con grandes historias y mitos que han perdurado a lo largo de los años. Te contamos más a continuación.
La cueva de Popola, Cansahcab:
La cueva de Popola es considerado como un ojo de agua, se encuentra en la comisaria de San Antonio XIat a 8 kilometros de la cabecera Cansahcab.
La entrada de la cueva se encuentra bajo un árbol de álamo y el agua es del tipo trasparente, para llegar al interior de la cueva se tiene que descender por la entrada lateral, el nivel de agua es de medio metro y en temporadas de lluvia suele subir su nivel.
Cuentan las personas del lugar que a las 12 del medio día se forma un remolino que hace que el agua suba y esto es ocasionado por una serpiente; este animal, no es más que aire, que si te encuentras en ese lugar a esa hora te da fiebre. En este cenote se llevaban a cabo las primicias y de ahí se tomaba el agua para preparar las bebidas que servirían para la plegaria.
Se reunían varios señores por la falta de lluvia, que tenían sus milpas por ese lugar se preparaban bebidas como atole nuevo, pozole entre otras… Estas eran llevadas antes del medio día hasta el Popola; se metían las 4 personas (de preferencia niños) para que sean los sapos de la ceremonia.
El que dirigía se llamaba el Men (sacerdote o brujo que hace el rezo) con la ayuda de su saston (como una bola de cristal donde puedes hablar a los 4 espíritus y al dios chaac). Los señores que participaban se ponían en un circulo, alrededor del Men, se sumergen las bebidas y la comida; entonces el Men comienza la ceremonia hablando a SAAMAN IIK(norte) NOJOOL IIK (sur) CHIKIIN IIK (oeste) LAAKIIN IIK (este), los niños que están
haciendo de sapos comienzan a actuar y croar como esos animales llamando al dios chaac.
Dentro del agua comienza a escucharse como truena la lluvia haciendo un pequeño remolino y el Men dice – “Esta tarde va a llover”. (esto es signo de que la ceremonia salió bien).
Los señores dicen que dentro del agua se sientes como comienzan a comer lo que se llevo ya que alrededor de los pies se golpea algo pero no se ve que es, pero se esta alimentando de la ofrenda,
nadie puede salir o romper el circulo ya que la lluvia no llegaría.
Se dice que la ultima que se hizo en ese lugar fue antes del ciclón Isidoro.
Interesante, ¿cierto? Muchas historias sin duda alguna aún no han sido descubiertas, sin embargo, las que ya se conocen, son simplemente impresionantes.
Recuperado de facebook en Ka’a síijil Cansahcab
Historia contada por Mario Soberanis