El día de hoy, te hablaremos acerca de una gran historia. Esta historia habla acerca de un venado, un venado que habitaba en los bosques, que según el pueblo cansahcabeño era enorme como un toro e inmortal. ¿Quieres conocer más? ¡Continua leyendo!
El venado sagrado de Cansahcab:
El animal tiene una característica muy particular: en su frente se ve una gran mancha blanca, por eso los cazadores y lugareños lo conocen como el venado, de la mancha blanca.
Muchos cazadores cuentan sus historias y parece indicar que es el mismo venado de la mancha que ha estado rondando desde Cansahcab hasta los rumbos de Timul, Maxcanú, Teya y las costas desde Dzilam hasta coloradas, muchos rancheros y cazadores describen a este animal de una manera muy similar…
Se cuenta que desde hace años existe un venado sagrado en el Mayab, que ronda silencioso en las noches un venado inteligente e inmortal. También se dice que un cazador principiante jamás logrará dispararle pues deja inmóvil el cuerpo sin explicación, cuenta un joven cazador que al ver ese venado mágico no pudo accionar el arma a pesar de que le pasó muy cerca. Cuando por fin reaccionó, corrió hasta reunirse con el grupo para contarles lo sucedido. Todos sus compañeros sabían una leyenda, o historia del gran venado, el cual es imposible de matar.
Pero el joven sintió que no existía tal venado sagrado e inmortal y solo fue mala suerte de cazador inexperto. Desde ese momento, debido a que no creía en leyendas, se propuso dar muerte al venado sagrado de los montes.
Así pasaron los años, el joven inexperto se convirtió en un experto cazador que presumía su gran habilidad para matar venados, pero nunca pudo olvidar lo pasado en su juventud aquella mañana de cacería cuando quedó inmóvil…
Su deseo por matar al gran venado se hizo tan obsesivo hasta el punto de dedicarle varias horas diarias al rastreo y búsqueda del legendario, incluso ofrecía recompensas a los cazadores para quien lograra darle información sobre el paradero de su presa.
Desde luego, el destino le presentaría una segunda oportunidad del cazador. Estando al acecho en los monte observó que algo se le acercaba, grande fue su sorpresa al ver al gran venado , tomó un suspiro para asimilar el momento esperado por años.
Apuntó con una maestría sin igual, el animal levantó la cabeza y observó al hombre que lo apuntaba con su escopeta, pero ya era tarde para huir, al instante se escuchó un fuerte sonido que acabó con el silencio que reinaba en el lugar.
Ese venado recibió una lluvia de proyectiles en su costado izquierdo que lo derribó al instante. Sin embargo, a los pocos segundos se puso de pie como si nada hubiera pasado, el cazador realizó un nuevo disparo que derribó de nuevo al venado, pero otra vez se levantó sin ningún daño.
Tantos disparos recibió la bestia y tantas veces se puso de pie que el infeliz hombre terminó por entender que su presa era inmortal o poseía algún don mágico porque las balas no logran dañarlo.
Dejó de disparar pues sus cartuchos se habían agotado y el venado se echó a correr por rumbos desconocidos. Se entristeció, pues había perdido la batalla de nuevo, pero se convenció que era imposible matar al gran venado, que sigue deambulando por los montes y terrenos de todo el Cansahcab.
Este es un venado mágico, tal vez ahora pueda estar del otro lado del mundo, en la gran reserva del NARA dónde existe el respeto a esta especie, es desconocido el paradero de ese gran venado, pero no faltara el día en nuevamente regrese por estos rumbos…
Esquivo y elegante, inocente y benéfico. Bestia sagrada, vital, encarnación de espíritus y leyendas.
Su primera representación se encuentra en las pinturas rupestres y significaba el misterio de la transformación del joven en adulto y, al propio tiempo, la extrañeza por la llegada de la vejez.
Los budistas afirman que es el animal del recto conocimiento y de la probidad.
También se le tenía, entre las tribus celtas, por conductor de los espíritus y simbolizaba la fuerza de la luz ante las tinieblas.
Los romanos y los helenos hablaban del carácter místico del ciervo, el cual sabía distinguir las distintas especies de plantas curativas, debido a su perfecta intuición y a su naturaleza dócil. Estaba considerado como un animal simbólico por excelencia, debido a su agilidad y belleza.
Hoy en día, vemos al venado como cualquier otro animal común y corriente, pero antes era considerado como todo un animal sagrado e imposible de matar. ¿Interesante, cierto?
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